Manillas residenciales

Para comprar unas manillas y no arrepentirnos al poco tiempo de haber hecho la compra. Conviene informarnos del material del que están fabricadas, de las posibilidades de terminaciones, acabados y colores, además de los diferentes complementos que nos ofrecen haciendo juego a las manillas.

Manillas de latón. Están fabricadas con una aleación de cobre y cinc. Las superficies están protegidas contra la corrosión por una pintura transparente de esmalte al horno, con una excelente adherencia y elevada resistencia a los rasguños. La suciedad se puede eliminar con un trapo suave, prescindiendo de productos de limpieza agresivos. Dentro de la amplia gama de acabados y diseños que nos ofrecen los fabricantes, las podemos clasificar en dos grupos (Manilla con placa larga y manilla con roseta o escudo redondo).

Complemento. Manillón o tirador.

Complemento. Condena o muletilla. Si elegimos una manilla con placa larga, la condena la incorporaran en la ferretería, puesto que hay que montarla en la placa a una distancia acorde al resbalón que tengamos en la puerta. En este caso hay que saber si la puerta abre a izquierdas o derechas, además de la distancia entre ejes que tiene el resbalón.

Si elegimos manilla con roseta o escudo redondo solo tenemos que tener en cuenta la distancia entre ejes del resbalón. Dependiendo de esa medida podremos optar por una condena de escudo de diámetro mayor o menor, evitando así que choque el escudo de la minilla con el escudo de la condena.

Complemento. Escudo bocallave. Es aplicable solo a manillas de escudo redondo o roseta. Hay que tener en cuenta la distancia entre ejes de la cerradura, evitando igualmente como en el caso anterior , que choquen los dos escudos.

Imágenes del catálogo de Bronces Iranzo